Con motivo de conmemorar el 24 de marzo, y con el objeto de estar presentes públicamente como
jóvenes metodistas en las Marchas que se dieron en varias ciudades del país, ofrecemos estos dos relatos de la experiencia que vivieron los jóvenes de la región Metropolitana y de la Región Central, distrito Córdoba.
Jóvenes metropolitanos
Para conmemorar un nuevo aniversario de aquel 24 de Marzo de 1976, a 33 años del inicio del capítulo más trágico de la historia de la Argentina que aún padecemos, desde la REMEJO (REpresentación MEtropolitana de JOvenes) organizamos una charla a cargo del pastor Daniel Bruno, sobre las dictaduras militares y la postura de la IEMA particularmente en el último golpe de estado. Participamos de la charla y de la posterior marcha a Plaza de Mayo más de
40 metodistas de distintas congregaciones de la región. Como siempre, marchamos junto al MEDH (Movimiento Ecuménico por los
Derechos Humanos) y a la APDH (Asamblea Permanente de los Derechos Humanos) que tanto nos identifican. Una vez más... la plaza se
colmó de banderas y pancartas de los mas diversos colores y cánticos con diversos tonos, pero todos ellos con un mismo sentimiento...
¡Nunca más! 30.000 compañeros desaparecidos… ¡Presentes! Ahora… ¡y siempre!
Además, se pidió a la justicia que acelere la concreción de los juicios por los delitos delessa humanidad, ya que muchos procesos hace años que culminaron su etapa preparatoria y siguen esperando indefinidamente ser
elevados a juicio. Se rechazó firmemente la posibilidad de instaurar la pena de muerte y las políticas de mano dura que no respetan la dignidad de las personas, las garantías individuales y el derecho al debido proceso.
Asimismo, se manifestó enérgicamente en contra de la baja de edad de imputabilidad penal, por la cual recaería sobre los niños la culpa del estado en el que se encuentra nuestra sociedad
jóvenes metodistas en las Marchas que se dieron en varias ciudades del país, ofrecemos estos dos relatos de la experiencia que vivieron los jóvenes de la región Metropolitana y de la Región Central, distrito Córdoba.
Jóvenes metropolitanos
Para conmemorar un nuevo aniversario de aquel 24 de Marzo de 1976, a 33 años del inicio del capítulo más trágico de la historia de la Argentina que aún padecemos, desde la REMEJO (REpresentación MEtropolitana de JOvenes) organizamos una charla a cargo del pastor Daniel Bruno, sobre las dictaduras militares y la postura de la IEMA particularmente en el último golpe de estado. Participamos de la charla y de la posterior marcha a Plaza de Mayo más de
40 metodistas de distintas congregaciones de la región. Como siempre, marchamos junto al MEDH (Movimiento Ecuménico por los
Derechos Humanos) y a la APDH (Asamblea Permanente de los Derechos Humanos) que tanto nos identifican. Una vez más... la plaza se
colmó de banderas y pancartas de los mas diversos colores y cánticos con diversos tonos, pero todos ellos con un mismo sentimiento...
¡Nunca más! 30.000 compañeros desaparecidos… ¡Presentes! Ahora… ¡y siempre!
Además, se pidió a la justicia que acelere la concreción de los juicios por los delitos delessa humanidad, ya que muchos procesos hace años que culminaron su etapa preparatoria y siguen esperando indefinidamente ser
elevados a juicio. Se rechazó firmemente la posibilidad de instaurar la pena de muerte y las políticas de mano dura que no respetan la dignidad de las personas, las garantías individuales y el derecho al debido proceso.
Asimismo, se manifestó enérgicamente en contra de la baja de edad de imputabilidad penal, por la cual recaería sobre los niños la culpa del estado en el que se encuentra nuestra sociedad
Marcos Gabriel Ferrari
Delegado titular de la REMEJO
Iglesia Evangélica Metodista Argentina
Jóvenes cordobeses
Unos veinticinco adolescentes y jóvenes, más unos cuantos padres y los pastores del distrito, nos reunimos en la iglesia del centro de Córdoba una hora antes de la convocatoria a la marcha, a las 18hs. Pudimos conversar acerca del sentido que como discípulos de Jesucristo le podíamos dar a este aniversario de una fecha trágica que -como suele suceder con estas fechas - hoy es un día resignificado positivamente: feriado nacional por la Verdad, la Justicia y la Memoria.- Y juntos recordamos las veces que el Señor de la vida en su palabra llamó a su pueblo a hacer memoria de su obra de libertad y del pacto que hacían con El. Así fue que recordamos el éxodo hebreo, el paso del temor a la libertad, de no ser pueblo a ser uno con una nueva identidad y una nueva manera de relacionarse entre sí, con los otros pueblos y especialmente con ese Dios que los juntó, los liberó del opresor y los guió como en una gran marcha por el desierto, a la tierra de la promesa.
Y recordamos también el texto que pusimos bien grande y claro en la pancarta que llevamos en la marcha: "Conocerán la verdad y la verdad los hará libres" (Jesús en Juan 8:32). Y conversamos acerca de la importancia de conocer la verdad histórica sobre estos terribles hechos que generó la Dictadura Militar no sólo en lo referido al terrorismo de estado sino en el ámbito económico social,
donde por ejemplo se triplicó la deuda externa del país. Hablamos de la necesidad de verdad para que se instaure la justicia con su reparación histórica y para que sean posibles el perdón y la reconciliación
en nuestro país.
Llamativamente el texto que escogimos es una continuación de una sentencia de Jesús donde dice: "Si vosotros permanecéis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos, y conocerán la verdad y la verdad los hará libres". Qué importante es permanecer en su palabra para no olvidar y para luchar por la verdad -en este como en otros temas nacionales-, para trabajar por la justicia -por los ocho niños que por día mueren víctimas de la desnutrición en nuestro país y para que Nunca Más el terrorismo y el poder del estado sean realidad y que Nunca Más se imponga la cultura del terror y del temor. Qué importante es tener una relación
con ese Jesús que nos renueva las fuerzas para seguir andando y trabajando por su Reino.
Fuimos a la marcha y fue una experiencia sumamente rica, no solo por sentirnos parte de grandes sectores de la sociedad que aspiran a trabajar por la Justicia, la Verdad y la Memoria, sino porque humildemente queríamos transmitir que desde
nuestra fe cristiana y evangélica nos sentíamos convocados a esta participación y a esta lucha. Y quizás por ello muchos de los que marchaban junto a nosotros miraban con sorpresa el logo de la iglesia y el texto bíblico y las remeras que nos identificaban como jóvenes de la Iglesia Evangélica Metodista Argentina. Hasta algunos se acercaban y preguntaban y se daba testimonio de nuestra fe. Y esa era la idea, marchar y estar presentes como testimonio público de nuestra fe en el Dios que nos llama a optar por la Justicia, la Verdad y la Memoria. Memoria de tantos argentinos, y de tantos hermanos de nuestra iglesia que desaparecieron o tuvieron que exiliarse por proclamar el evangelio pleno de nuestro Señor. Y sentí que era algo así como una metáfora de la Iglesia que creo el Señor quiere: marchando, en movimiento, en la calle y no sólo en el templo y encontrándose
con otros en el compartir la fe y la lucha por la vida
P. Pablo G. Oviedo
(Por Equipo Regional de Jóvenes-Central)
jovenesiemaregioncentral@gmail.com
